Ejercicios de Estilo (a la Petro)
Mal le queda a un estadista convertirse en aquello que criticó y condenó. Y eso es lo que el presidente está haciendo, quién sabe por consejo de quién
En 1947, uno de los escritores más brillantes de la literatura francesa, llamado Raymond Queneau, publicó un libro sorprendente e inclasificable que demostró como un único relato de apenas un par de párrafos podía convertirse en infinidad de textos con el mismo sentido y extensión, pero cada uno con un estilo de narración distinta.
Inspirado en esa obra genial, hoy traigo un único ejercicio de estilo para demostrar como un mismo relato cambia sólo porque su autor pasa de observador a protagonista.
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En 1947, uno de los escritores más brillantes de la literatura francesa, llamado Raymond Queneau, publicó un libro sorprendente e inclasificable que demostró como un único relato de apenas un par de párrafos podía convertirse en infinidad de textos con el mismo sentido y extensión, pero cada uno con un estilo de narración distinta.
Inspirado en esa obra genial, hoy traigo un único ejercicio de estilo para demostrar como un mismo relato cambia sólo porque su autor pasa de observador a protagonista.
Septiembre 22 de 2020
@petrogustavo publica en Twitter (me niego a llamarlo X) ante el interminable show televisivo de Iván Duque llamado Prevención y Acción, creado durante la pandemia del coronavirus:
“Y mientras el ministro de Defensa manda, el presidente en su reality. Volvimos a los tiempos de Turbay Ayala”.
Marzo 27 de 2025
@petrogustavo responde en Twitter una publicación del senador Miguel Uribe en la que este último habla de una acción judicial que presentó para que los consejos de ministros no sean transmitidos por televisión.
“Como su abuelo, Turbay quiere censurar. No quieren que el pueblo se informe. Solo quieren que se escuchen sus engaños.”
Más allá de la evidente fijación que tiene el presidente Petro con Julio César Turbay, algo comprensible, pues en aquel tiempo Colombia tuvo que soportar los horrores del Estatuto de Seguridad y la abominable persecución que este representó incluso para los más pacíficos intelectuales de izquierda, mal le queda a un estadista convertirse en aquello que criticó y condenó. Y eso es lo que el presidente está haciendo, quién sabe por consejo de quién.
Mientras que el programa de TV de Duque empezó en marzo de 2020 con el inicio de la pandemia y a año y medio de terminar mandato, el programa de TV de Petro empezó en febrero de 2025 en medio de una crisis sanitaria y a año y medio de terminar mandato. Mientras que el programa de Duque se dio cuando su popularidad alcanzaba niveles muy bajos, el programa de Petro se estrenó cuando su popularidad alcanzaba niveles muy bajos. Mientras que el programa de Duque se veía ochentero, el programa de Petro también. Mientras en el programa de Duque, él y su Gobierno se mostraban como los más eficientes, en el programa de Petro, él y su Gobierno se muestran como los más eficientes.
Eso sí, Duque no salió a gritar censura cuando le llovieron las críticas, en cambio Petro…